pués del último conflicto de ocho días que tuvo lugar este mes entre Israel e islamistas en la Franja de Gaza, comprometidos con la destrucción de Israel y opuestos a sus esfuerzos hacia una paz negociada. El departamento de Estado estadounidense dijo el miércoles que el subsecretario de Estado Bill Burns y el enviado de paz para Oriente Medio David Hale viajaron el miércoles a Nueva York, en un último esfuerzo para que Abas reconsidere su posición. La secretaria de Estado Hillary Clinton reiteró a los periodistas el miércoles en Washington el punto de vista de Estados Unidos de que la campaña palestina estaba equivocada y que los esfuerzos deberían centrarse en la reactivación del estancado proceso de paz en Oriente Próximo.

"El camino hacia una solución de dos estados que satisfaga las aspiraciones del pueblo palestino es a través de Jerusalén y Ramala, no en Nueva York", dijo. "La única manera de conseguir una solución duradera es la apertura de negociaciones directas", agregó. La portavoz del departamento de Estado, Victoria Nuland, reiteró las advertencias de que la medida podría llevar a una reducción de la ayuda económica de Washington para los palestinos. Los israelíes también han advertido de que podrían realizar descuentos significativos de transferencias mensuales de los impuestos que Israel recauda en nombre de los palestinos. Conceder a los palestinos el título de "Estado observador no miembro" no está a la altura de una membresía plena de la ONU - algo que los palestinos no lograron el año pasado. Pero les permitiría acceder a la Corte Penal Internacional y otros organismos internacionales, si optan por unirse a ellos.