La geopolítica del narcotráfico en América Latina - TicoVisión
En Costa Rica hay ya barrios tomados por los narcotraficantes, lo sé porque lo he vivido en carne propio en mi natal Sagrada Familia, donde sospecho que hasta hay pactos con los grupos policiales encargados de reprimir...
Por el Dr. Guillermo Carvajal Alvarado * Más artículos en la columna del Dr. Carvajal
En pasados artículos, libros y comunicaciones he explicado que coca no es cocaína, la cocaína se sintetiza a partir de unos componentes químicos que transforman la coca cocaína. La hoja de coca se consume aún en algunos países andinos como una infusión tradicional y es una planta beneficiosa. A finales del siglo XIX se sintetizó en Europa la hoja de coca y se produjo la cocaína. Como todo al principio, nadie pensó que esto se convertiría en una pandemia humana.
De hecho en los años 1930 los anuncios de las grandes farmacias en Costa Rica tal y como ha demostrado el acucioso investigador Guillermo Barzuna, la cocaína se podía comprar en las farmacias y entre los beneficios del medicamento se señalaban que ayudaba a dejar adicciones como el alcohol, la nerviosidad (dígase hoy stress) y de muchos otros males. No obstante, el precio de la droga era muy bajo y se vendía por cierto en las farmacias, que como la Botica Solera, le estampaban en su parte frontal “droguería”, pues los farmaceutas preparaban sus propias pociones o fórmulas.
De hecho en los años 1930 los anuncios de las grandes farmacias en Costa Rica tal y como ha demostrado el acucioso investigador Guillermo Barzuna, la cocaína se podía comprar en las farmacias y entre los beneficios del medicamento se señalaban que ayudaba a dejar adicciones como el alcohol, la nerviosidad (dígase hoy stress) y de muchos otros males. No obstante, el precio de la droga era muy bajo y se vendía por cierto en las farmacias, que como la Botica Solera, le estampaban en su parte frontal “droguería”, pues los farmaceutas preparaban sus propias pociones o fórmulas.
Foto cortesía de yungas.com.bo
De manera que el consumo de la droga es de vieja data, lo que no imaginó ningún estudio, es que detrás de esta droga vinieran grupos mafiosos que con sobornos obligaron a los campesinos a producir más droga, de menor calidad y crear circuitos de comercialización.
La droga que se produce en los países andinos se continúa utilizando como una bebida relajante, pero otro derivado el crack o perico como se le llamó en New York ha demostrado ser un producto tremendamente adictivo, crea una gran dependencia, lleva al abandono de la persona y la total sumisión de la persona a la droga.
Hoy ya es muy frecuente el uso del crack en nuestros barrios populares y dentro de ciertos medios sociales, donde se pueden encontrar un coctel de cerca de 200 productos sintetizados que son adictivos y que producen esa relación colectiva que vemos en muchos espectáculos públicos.
No obstante, nuestro consumo es bajo con respecto al gran consumidor de cocaína que son los Estados Unidos, donde el consumo se ha generalizado a todos los estratos sociales y como se produce en el sur y se consume masivamente en norte, quedamos en una especie de corredor que hace que los grupos organizados (carteles) que se pelean la entrada al mercado norteamericano, hayan desestabilizado toda nuestra región. Han suplido armas a los grupos distribuidores y han dominado regiones, comunidades y barrios.
En Costa Rica hay ya barrios tomados por los narcotraficantes, lo sé porque lo he vivido en carne propio en mi natal Sagrada Familia, donde sospecho que hasta hay pactos con los grupos policiales encargados de reprimir estas actividades. Son jóvenes violentos, que con un arma en la mano matan a sangre fría por encargo o placer. Son los famosos enclaves del narcotráfico, esos por donde ya no podemos caminar los ciudadanos.
Nuestros cuerpos policiales, poder judicial y clase política esta penetrada de los dineros de la actividad del narcotráfico, hay rutas nocturnas internas de la ciudad utilizadas para llevar y traer mercancía en las zonas urbanas desde Escazú a Desamparados, las rutas evitan atravesar el centro de la capital.
Las soluciones locales en incautación de droga pues evitan que esa droga entre al mercado y obliga a los narcotraficantes sobre producir, si las incautaciones no funcionan el mercado se satura y se puede distribuir más droga en América Latina, donde ya existe un mercado, tal y como he dicho.
El camino verdadera será una desintoxicación de la población de los Estados Unidos en donde esta pandemia ha causado estragos ya en varías generaciones una campaña de salud pública podría ayudar a bajar los niveles de consumo.
Mientras tanto en nuestra América Latina los grupos de narcotraficantes se organizan, se vuelven más beligerantes, y los canales de televisión hacen del estilo de vida del narcotráfico su apología, "living la vida loca" mujeres, sexo, drogas, muerte, son hoy los temas de las telenovelas el capo es el gran ícono de los niños de las barriadas populares.
El panorama parece sombrío en virtud de la violencia, la impunidad judicial, y el efecto de una televisión que lo único que le interesa es captar audiencia aunque los contendidos sean de la cultura basura.
* Dr. Guillermo Carvajal Alvarado: Catedrático en la Universidad de Costa Rica. Estudió Géographie et amémagement du territoire en University of Toulouse II – Le Mirail. Profesor en la Universidad de Costa Rica, en el Truman Institut Israel y en Utah State University. Alcanzó el rango de Catedrático Universitario. Ha publicado numerosos articulos y libros sobre temas sociales de América Central. Vive en San José, Costa Rica y es Gerente Propietario de Editorial y Librería Alma Mater.
La droga que se produce en los países andinos se continúa utilizando como una bebida relajante, pero otro derivado el crack o perico como se le llamó en New York ha demostrado ser un producto tremendamente adictivo, crea una gran dependencia, lleva al abandono de la persona y la total sumisión de la persona a la droga.
Hoy ya es muy frecuente el uso del crack en nuestros barrios populares y dentro de ciertos medios sociales, donde se pueden encontrar un coctel de cerca de 200 productos sintetizados que son adictivos y que producen esa relación colectiva que vemos en muchos espectáculos públicos.
No obstante, nuestro consumo es bajo con respecto al gran consumidor de cocaína que son los Estados Unidos, donde el consumo se ha generalizado a todos los estratos sociales y como se produce en el sur y se consume masivamente en norte, quedamos en una especie de corredor que hace que los grupos organizados (carteles) que se pelean la entrada al mercado norteamericano, hayan desestabilizado toda nuestra región. Han suplido armas a los grupos distribuidores y han dominado regiones, comunidades y barrios.
En Costa Rica hay ya barrios tomados por los narcotraficantes, lo sé porque lo he vivido en carne propio en mi natal Sagrada Familia, donde sospecho que hasta hay pactos con los grupos policiales encargados de reprimir estas actividades. Son jóvenes violentos, que con un arma en la mano matan a sangre fría por encargo o placer. Son los famosos enclaves del narcotráfico, esos por donde ya no podemos caminar los ciudadanos.
Nuestros cuerpos policiales, poder judicial y clase política esta penetrada de los dineros de la actividad del narcotráfico, hay rutas nocturnas internas de la ciudad utilizadas para llevar y traer mercancía en las zonas urbanas desde Escazú a Desamparados, las rutas evitan atravesar el centro de la capital.
Las soluciones locales en incautación de droga pues evitan que esa droga entre al mercado y obliga a los narcotraficantes sobre producir, si las incautaciones no funcionan el mercado se satura y se puede distribuir más droga en América Latina, donde ya existe un mercado, tal y como he dicho.
El camino verdadera será una desintoxicación de la población de los Estados Unidos en donde esta pandemia ha causado estragos ya en varías generaciones una campaña de salud pública podría ayudar a bajar los niveles de consumo.
Mientras tanto en nuestra América Latina los grupos de narcotraficantes se organizan, se vuelven más beligerantes, y los canales de televisión hacen del estilo de vida del narcotráfico su apología, "living la vida loca" mujeres, sexo, drogas, muerte, son hoy los temas de las telenovelas el capo es el gran ícono de los niños de las barriadas populares.
El panorama parece sombrío en virtud de la violencia, la impunidad judicial, y el efecto de una televisión que lo único que le interesa es captar audiencia aunque los contendidos sean de la cultura basura.
* Dr. Guillermo Carvajal Alvarado: Catedrático en la Universidad de Costa Rica. Estudió Géographie et amémagement du territoire en University of Toulouse II – Le Mirail. Profesor en la Universidad de Costa Rica, en el Truman Institut Israel y en Utah State University. Alcanzó el rango de Catedrático Universitario. Ha publicado numerosos articulos y libros sobre temas sociales de América Central. Vive en San José, Costa Rica y es Gerente Propietario de Editorial y Librería Alma Mater.
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